viernes, 25 de octubre de 2013

"La historia de la censura es la historia de la cultura en la Argentina"

Viernes 25 de octubre
Entrevista a Gabriela Pesclevi, miembro de “Libros que muerden”.

Desde hace varios años, el Grupo La Grieta, realiza la muestra “Libros que muerden”, una recuperación de libros que fueron prohibidos por las dos últimas dictaduras cívico militares. Actualmente, están lanzando una convocatoria que consiste en la recopilación de relatos que vivencien historias en relación a los libros censurados.
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En el año 2006, en el marco de los 30 años del último golpe cívico militar, el Grupo La Grieta se propuso reunir la literatura infantil y juvenil que había sido censurada en la Argentina. La muestra se llamó “Libros que muerden” y forma parte de la Biblioteca Popular La Chicharra y la Asociación Civil de La Grieta en la Ciudad de La Plata.
En comunicación con Rap, Gabriela Pesclevi, miembro de La Grieta, contó sobre la convocatoria que iniciaron hace ya algunos días. Invitan a relatar historias que vivencien experiencias de la gente con los libros, en las últimas dos dictaduras argentinas. Pueden ser experiencias personales o de algún tercero que se las haya contado: “La invitación es de un texto sencillo, no tiene que ser en el formato académico, solamente el deseo de contarlo, de compartirlo”, dijo Gabriela.
La idea de este proyecto surge a partir de las experiencias vividas en las muestras de “Libros que muerden”. “En las muestras nos encontrábamos con mucha gente que, de manera oral, nos contaba experiencias personales, o de otros, sobre libros que habían tenido que ocultar. A raíz de toda esa efervescencia que ocurría en las muestras, fue que decidimos lanzar la convocatoria”, dijo Gabriela.
La convocatoria es nacional e internacional. “Estamos pensando que puedan participar personas que hayan vivido en la década del 70 en la Argentina y que actualmente vivan en el exterior, que hayan tenido que esconder libros, guardarlos, o incluso cosas más fuertes como el hecho de enterrarlo en un pozo, o prenderlos fuego, como fue el caso de artistas o escritores argentinos que terminaron prendiendo un pequeño fuego en una bañera”, contó Gabriela.
“Queremos rescatar un poco esas narraciones, más que nada para poder reflexionar también sobre los títulos, sobre la literatura que tuvieron que ocultar, impulsados más que por el ocultamiento, por la idea del rescate, estos relatos tienen el objetivo de rescatar una bibliografía, una memoria, una experiencia, una anécdota que quizá los atravesó“, expresó Gabriela.

La censura como parte de la cultura argentina
 “La historia de la censura, es la historia de la cultura en la Argentina", dijo Gabriela.  "No se restringe sólo al momento de la última dictadura. Con Onganía y con la del 76 se establece una manera sistemática de censurar, sin embargo, desde que conformamos la nación, hay un aparato censor desde el poder”, agregó.
En las últimas dictaduras “la cantidad de libros, de películas, de canciones que estuvieron prohibidos, es motivos de que hoy redhibamos toda esa literatura, ese legado que de por sí ya producía alientos para entender el futuro. En pos de poder entender este mecanismo de sordo, de coerción, que se generó de una manera muy inteligente, no se generó una manera brutal, es coherente a un aparato inteligente que decide borrar no una, sino varias maneras de pensar que no se acomoden a un modelo como el que quisieron llevar adelante”, explicó.
Sin embargo, Gabriela asegura la censura no es un problema que sólo tuvo lugar en las dicturaduras,“actualmente, el hecho de que una persona no pueda comprarse un libro, de alguna manera participa de… no sé si llamarlo censura, pero ¿por qué una persona no puede acceder a comprarse un libro? ¿qué es lo que fue pasando?”. “Me parece que ahí están clausurados sus derechos”, concluyó.


Los textos se pueden enviar por correo a librosquemuerden2013@gamail.com o acercarlos al espacio físico del Grupo La Grieta, en 18 y 71, hasta el 16 de diciembre inclusive. Serán incluidos como material permanente de las muestras itinerantes y en la colección “Libros que importan”. Además, formarán parte de un proyecto de la Asociación Civil La Grieta y la Biblioteca popular La Chicharra del 2014.

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